Búscame con llantos
consternados en la azotea;
alquilame las pupilas
envenename la cornea
escupe la retina
envuelveme con el manto del iris,
lleguemos juntos al acantilado
y perdámonos ante la inmensidad
de nuestros ojos embravecidos.
El mirar con tal pasión solo es alcanzada por aquellos que no temen entregarse. Saludos Karen Pamela Ortiz Velarde, siempre da gusto varar en sus versos.
El mirar con tal pasión solo es alcanzada por aquellos que no temen entregarse. Saludos Karen Pamela Ortiz Velarde, siempre da gusto varar en sus versos.
ResponderEliminarKareen*
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